
Te gustaría no saber de más, lo justo para que a ese día le dediquemos lo poco que conocemos, y sin ponerle esfuerzo, lo que imaginamos, se convierte en real introduciéndonos de lleno en el universo.
Como nos gustaría volver siempre al principio y mantenernos ahí, inmoviles, comprendiendo por fín que no hay prisa por avanzar, ni por llegar más rapido, ni por ser el primero.
El mundo nos ofrece que el comienzo de nuestra vida sea feliz e ignorante, donde ante todo están nuestros antojos a lo importante y aun soñando, creamos distintas y emocionantes historias.
Imagina un camino sin suelo, donde tu escoges qué cielo, qué color y qué deseos. Imagina sin ser el imaginado, qué trayecto nuevo tenemos hoy por cuento. Imagina por un momento, que le dí la vuelta al mundo y ahora es cuando está perfecto.
(Pero anda con cuidado, porque sin quererlo puede ser no-eterno, y al primer burdo arrepentimiento (o cualquier motivo de enfermos), volveremos juntitos otra vez al infierno.)
Asi que por mas consejos que te dé, y aunque te cuente todos mis trayectos, no tengo poder para controlar tus deseos, yo sólo soy un mensajero dentro de tus recuerdos y enlazo aquellas anécdotas,que las cuales creyendo que simplemente fueron imaginativas, nos marcaron un camino interno en nuestro pensamiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario